Mar de nubes

La semana pasada, con un clima bastante benévolo para esta época del año, me animé a subir al Despeñador de buena mañana, e hice estas fotografías de la niebla baja, que como iba ascendiendo iba dejando atrás para captar esas imágenes de mullida alfombra de nubes que (creo) tanto nos gustan a todos. Aquí dejo otra entrega anterior de Daniel Rico por si quieren prolongar las sensaciones.

Al nivel de la niebla, por la senda del Despeñador.
Al nivel de la niebla, por la senda del Despeñador.
En la ascensión, comienzas a dejar la niebla atrás.
En la ascensión, comienzas a dejar la niebla atrás.
Aquí, con vistas a la Crestería.
Aquí, con vistas a la Crestería.
La niebla cubría todo el valle.
La niebla y las nubes cubrían todo el valle.
Otra vista.
Otra vista.
Al fondo del Maigmó, un mar de nubes.
Al fondo del Maigmó, un mar de nubes.
Empezaba a calentar el sol.
Empezaba a calentar el sol.

Al fondo se oculta el Cid.
Al fondo se oculta el Cid.

2 thoughts on “Mar de nubes”

  1. Me encantan, y demuestra que la montaña nunca defrauda; si hay sol, ves el valle, si hay nube, ves esto, si ha llovido, la humedad y el rocío son muy agradables, y si hay nieve, ¡fiesta! Disfrutemos de lo que tenemos!

  2. Néstor un reportage precioso, y mientras admiraba tus imágenes me he trasladado fuera de esta rutina diaría. Me encantan las nubes, sus formas y sus movimientos. Gracias por compartir tus experiencias visuales. Y ÁNIMO COMPAÑERO!

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